GESTACIÓN
GEMELAR
Al evaluar una gestación gemelar se valora para cada feto:
- Vitalidad. Presencia de latido cardíaco fetal.
- Corionicidad o número de placentas. El mejor momento para la valoración del número de sacos gestacionales es el primer trimestre.
- Estática fetal. De suma importancia en el tercer trimestre de cara al parto
- Biometría fetal. Evaluación sistemática de parámetros fetales, como hemos revisado para gestaciones únicas en capítulos anteriores.
- Morfología fetal.
La discordancia de las biometrías o en la cantidad de liquido amniótico, son hallazgos que deben hacer sospechar de la presencia de complicaciones y precisan valoración urgente.
La gestación gemelar se trata de un embarazo en el que se desarrollan simultáneamente dos fetos. Aproximadamente 2/3 de las gestaciones gemelares presentan dos placentas (bicorial) y dos sacos amnióticos (biamniótico).
Existen también gestaciones gemelares que comparten una sola placenta (monocoriales) o muy raramente pueden compartir placenta y bolsa (monocoriales monoamnióticas). En las gestaciones en las que los fetos comparte placenta presentan mayor riesgo de complicaciones que cuando existen dos placentas.
Las gestaciones gemelares tienen mayor riesgo de:
- Prematuridad
- Mortalidad perinatal
- Defectos congénitos
- Retraso del crecimiento intrauterino
- Preclampsia
- Distocias del parto: mala presentación fetal, parto obstruido.
- Complicaciones postparto: atonía uterina.
Por todo ello, toda gestación gemelar debe recibir un control del embarazo y del parto como gestación de alto riesgo.
En más raras ocasiones en una misma gestación pueden identificarse tres o más fetos. Es lo que llamamos una gestación múltiple. Este tipo de embarazo presenta un riesgo aún mayor de complicaciones, como el alto riesgo de prematuridad, que las gestaciones gemelares.
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